Cena Ecológica, parte de la pintura de Maximino Cerezo arreglo: Ana Isabel Pérez y Martín Valmaseda

Cena Ecológica, parte de la pintura de Maximino Cerezo arreglo: Ana Isabel Pérez y Martín Valmaseda

29 de junio de 2018

Canción: ¿QUIÉN ME TOCÓ?


Esta canción de Roberto Orellana,  “¿Quién me ha tocado?” puede ser importante  para cambiar nuestra actitud frente a Jesús, frente a la eucaristía, frente a la liturgia.

Jesús no caminaba por  las nubes, ni por los templos… caminaba en el pueblo y entre el pueblo… No iba por modernas calles asfaltadas sino por las callejuelas de las aldeas y quienes lo seguían no lo hacían a distancia, sino cerca. 

La gente se apretaba en torno suyo  para escucharlo mejor… a veces se subía a una barca para que no lo empujasen a la orilla del mar.  Esta vez una  mujer enferma… una enfermedad que  consideraban entonces castigo del pecado  se acercó a Jesús.  

La mujer tocó a Jesús… ¡qué falta de respeto!  Hoy mucha gente ni se atreve ni a  mirar a la eucaristía. Cuando el celebrante dice tomen y coman esto es mi cuerpo,…  muchos agachan la cabeza… no se atreven a mirar. Cuando reciben la comunión  no se atreven a  extender la mano  para  tocar con ella a Jesús. Menos mal que  abren la boca para recibirle,  aunque muchos en su vida pequen más con  la boca que con la mano…  ¿Por qué  habrá tantos escrúpulos en la religión? ¿Porque a un Jesús simpático, comunicativo, acogedor tendremos tantos falsos respetos?  ¿Ustedes se atreverían a abrazarle  como María Magdalena? ¿… se atreverían a tocarlo?  Esta canción, esta narración evangélica nos debe hacer pensar, liberarnos de tantos falsos respetos… Si lo tocamos  nos librará de nuestros males y nuestra falsa religión.  Toquemos a Jesús.