HISTORIAS BIBLICAS DE AYER 
QUE SE REPITEN HOY
EL LÁTIGO  
 Capítulo  4.- el látigo peregrino
Ayer
 Y así,
con la celeridad del tiempo narrado, aparecemos en la   Edad Media. ¿Y dónde mejor en 
esa época que
a lo largo del camino de Santiago en el norte de España? 
Es que, de ermita en ermita y de
monasterio en monasterio, el inquieto cordel había ido pasando por toda Europa.
Con él también, de boca en boca, había corrido la historia del látigo. Había
corrido, como buena tradición medieval, corrigiéndose y aumentándose. Ya se
contaban leyendas de ángeles con látigos de fuego y dragones sometidos con la
cuerda atada al hocico.
El hecho es que un monje heredero de la
reliquia, afincado en el sur de Francia, emprendió la peregrinación a la tumba
del apóstol. Se ciñó el hábito de peregrino con la santa cuerda y empezó a
correr leguas.








