Tres mujeres saturan sus cuerpos con plantas medicinales, materiales ceremoniales y cantos sanadores. Se preparan para conectarse con las energías de los rajawales del Cholq’ij —Calendario Lunar— invocando a B’atz’ (Mono), E’ (Gato de Monte) y Aj’ (Armadillo). A través de la danza, se deleitan y se amarran sus fajas para fortalecerse, florecer y compartir ese renacer con todo el público.
Ajchowen es una palabra del idioma Kaqchikel, que en
español significa “artista” o “la que hace arte”. Con este nombre se fundó la
colectiva Mujeres Ajchowen, integrada por actrices-danzantes de comunidades
indígenas K’iche’ y Kaqchikel, quienes cuentan con el acompañamiento de abuelas
ajq’ijab’ (cargadoras del tiempo) para guiarlas en sus procesos creativos.
Desde su fundación en 2011, la colectiva también ha contado con la participación mujeres de origen maya Mam y Q’eqchi’, además de un director teatral mestizo. El propósito de esta colectiva es fortalecer y dignificar el arte desde las mujeres mayas, creando su propio espacio de expresión para la recuperación de la memoria histórica y la sanación.