Blanca Morales es una ambientalista de Palencia, Guatemala. Su nombre trae consigo una lucha de más de diez años para la conservación de los recursos naturales en la localidad.
Ahora, junto con su
familia, busca acciones para preservar los nacimientos de agua alrededor del
vertedero municipal, el cual ha funcionado sin las respectivas licencias ambientales
y ha contaminado el municipio, pero también amenazado la calidad del aíre de
las localidades circunvecinas.
Morales es una lideresa
comunitaria. Es profesional del derecho y se dedica a la producción avícola
orgánica, la protección y regeneración ambiental en la microcuenca de Las Cañas
y desde hace más de 10 años junto con su familia ha denunciado las
irregularidades y problemas ambientales que genera el vertedero municipal
ubicado en el kilómetro 24.5 de la carretera al centro del municipio, en el
caserío El Tabacal.
Morales y su familia
viven a escasos metros de donde en 2014 se instaló un vertedero. Un hecho
ocurrido durante la administración del alcalde Ramiro Pérez.
La instalación surgió
ante la necesidad de contar con un lugar para el manejo y tratamiento de los
desechos sólidos de más de 75 mil habitantes de Palencia, sin embargo, en la
actualidad, se ha convertido en uno de los principales focos de contaminación
del aire en el área norte del departamento de Guatemala.
Blanca Morales muestra
una de las denuncias que presentó por la contaminación ambiental que generó el
vertedero municipal. Foto de Derik Mazariegos
La ambientalista,
comenta que, al principio, se pensó en el vertedero como un terreno para “botar
los desechos y compactarlos con selecto, generando una suerte de relleno
sanitario”, a pesar de no contar con los dictámenes técnicos ambientales
necesarios.
El vertedero contamina
nacimientos de agua
El sector donde vive
Morales se encuentra en la región de la microcuenca de Las Cañas, un área de
bosque espinoso y puerta de entrada al corredor seco.
Cerca de su vivienda se
encuentra el terreno del vertedero municipal, y en uno de los costados pasa el
río de Las Cañas, donde opera una empresa extractiva de arena y piedrín.
Además, está próxima a la finca Las Hormigas, una zona que ha perdido
significativamente la cobertura boscosa debido al aprovechamiento ilegal de
madera para leña, incendios forestales y, recientemente, la presencia de licencias
de exploración minera.
A pesar de las amenazas
ambientales que enfrenta el territorio, Morales se ha organizado junto con su
familia y vecinos de la microcuenca de Las Cañas para realizar rondas de
prevención y colaborar en el control y mitigación de incendios forestales.
Cada año participa en
acciones de reforestación con especies nativas en el sector de la microcuenca
de Las Cañas.
El lugar donde se ubica
el vertedero, según Morales, tiene varios nacimientos de agua que alimentan la
microcuenca de Las Cañas, la cual desemboca en el río Motagua.
Asegura que, sin las
condiciones necesarias, el vertedero comenzó a funcionar, recibiendo la basura
de los vecinos que pagan el servicio de extracción municipal y servicios
privados.
Además, algunos vecinos
de las comunidades aledañas empezaron a botar basura en el lugar, ya que en ese
momento carecía de una garita de control.
“Eso generó una clara
amenaza ambiental para el sector, ya que hubo un descontrol en el tratamiento
de los desechos”, detalla.
Ese caos provocó que
los vecinos frecuentaran el vertedero para buscar alambre y chatarra, para lo
cual le prendían fuego a la basura.
Estas acciones llevaron
a que, en octubre de 2014, Morales y su familia presentaran la primera denuncia
y solicitaran medidas de seguridad para evitar que la quema de basura en las
cercanías de su propiedad causara daños en su terreno y contaminación del aire
en el sector.
Alcalde municipal busca
regulación
En 2015, después de
haber gobernado por dos periodos con el partido Unidad Nacional de la Esperanza
(UNE), y tras haber perdido la alcaldía en 2012, Alberto Reyes regresó a la
municipalidad de Palencia, esta vez de la mano del partido Líder.
Al asumir el cargo,
heredó el vertedero municipal sin planificación, con graves problemas de
contaminación y sin dictámenes técnicos.
Una de sus primeras
acciones que tomó en su tercer periodo al frente de la municipalidad fue
solicitar un dictamen técnico sobre el vertedero, el cual fue desfavorable
debido a la presencia de nacimientos de agua.
Por el área, pasa el río Teocinte que atraviesa el terreno del vertedero, lo cual ha generado inestabilidad del suelo en el sector y la vulnerabilidad de la flora, la fauna y la salud humana.
Esto quedó evidenciado
en las actas de las sesiones del Concejo Municipal número 33, 45 y 59-2016, en
las cuales se evidencian las denuncias y solicitudes de la Asociación de
Vecinos (ADIPA), de la cual Morales es fundadora, para revisar los estudios de
impacto ambiental y corregir las rutas para el manejo y el tratamiento de los
desechos sólidos.
En 2016 se presentaron
varios incendios que, sospechosamente según los vecinos, parecían intencionados
para reducir la cantidad de basura en el lugar.
Esto ocasionó grandes
cantidades de humo, contaminación del aire y pérdida de flora en el área.
Morales y su familia
presentaron denuncias ante la Policía Nacional Civil (PNC), en el Ministerio
Público (MP) y en la oficina del Procuraduría de Derechos Humanos (PDH).
Todas las denuncias
fueron presentadas contra las autoridades municipales por su presunta
implicación en la comisión de delitos ambientales, atentados contra la salud y
violaciones a los derechos humanos de los vecinos del sector del Tabacal y las
comunidades aledañas.
La denuncia presentada
ante el PDH avanzó con un dictamen favorable; sin embargo, el expediente fue extraviado
y nunca se notificó.
A pesar de las
denuncias, anomalías y problemas ambientales que ya generaba el vertedero
municipal, en 2017 la municipalidad decidió adquirir un terreno en el sector
para ampliar el vertedero y construir una planta de tratamiento de desechos
sólidos.
El terreno de 12 mil
697.2 metros cuadrados fue adquirido por un monto de Q82 mil 23.90, el cual fue
utilizado posteriormente para la construcción de la planta de tratamiento de
desechos sólidos.
En 2018 se lanzó a
oferta pública en el portal de Guatecompras el proyecto para la construcción de
un edificio de clasificación y tratamiento de desechos sólidos y bodegas en el
caserío El Tabacal. El contrato fue adjudicado a Sergio Mauricio Ramos
Sandoval, titular de la constructora Ramos, por un monto total de Q 2 millones
300 mil.
El proyecto tuvo
algunas complicaciones e incluso fue suspendido en una ocasión debido a la
falta de avance físico de la obra, según consta en el acta número 25-2019 de la
sesión del Concejo del jueves 11 de abril de 2019.
Pese a las múltiples
inconsistencias, el proyecto fue entregado el 28 de mayo de 2020 con ventanas
de paletas de cristal, puertas metálicas, sanitarios y andenes metálicos de
descarga, según consta en el acta 26-2020 de entrega del proyecto. Sin embargo,
debido a la falta de uso y de un plan de manejo, sumado a la falta de seguridad
perimetral, el proyecto fue saqueado y se robaron las puertas, sanitarios,
ventanas y andenes. Además, no se dispone de fotografías que confirmen si el
proyecto fue entregado en esas condiciones. Al visitar el lugar, se puede
observar que la construcción no presenta rastros de haber tenido puertas,
sanitarios, energía eléctrica o agua potable, como se menciona en el acta de
entrega.
El 29 de agosto de 2021
entró en vigor el acuerdo gubernativo 164-2021, que establece las normas
sanitarias y ambientales para la gestión de los residuos y desechos sólidos
comunes, y un cronograma de cumplimiento para requerimientos progresivos.
Este acuerdo refuerza
la obligación que tienen las municipalidades de cumplir con el artículo 97 de
la Constitución Política y el artículo 68 del Código Municipal, que se refieren
a las responsabilidades y obligaciones ambientales de los gobiernos locales.
En este mismo año,
Morales presentó una nueva denuncia ante el MP por delitos ambientales, la cual
fue archivada sin ninguna explicación.
A pesar de que a la
fecha de entrada en vigor del acuerdo gubernativo el municipio de Palencia ya
contaba con una planta de tratamiento de desechos sólidos, la municipalidad
decidió dejar en el abandono la estructura y no implementó un plan de gestión
de residuos para responder al acuerdo gubernativo 164-2021.
Proyecto millonario
La municipalidad de
Palencia decidió sacar a oferta pública en Guatecompras el 11 de julio de 2023
un proyecto para la ampliación de la infraestructura de la planta de tratamiento
en el caserío El Tabacal.
Este proyecto fue
adjudicado a Proyectos y Servicios de Oriente S.A. por un monto de Q24 millones
992 mil 415.84.
Los trabajos en el área
del vertedero municipal comenzaron el 5 de octubre de 2023 y tienen como
objetivo la construcción de una bóveda para la contención del río Teocinte, la
conformación de celdas para el relleno con geomembrana, el mejoramiento y
ampliación del centro de clasificación y composta, así como la instalación de
sanitarios y otros complementos técnicos.
Hasta la fecha, solo se
ha avanzado 17.80% de la obra, según el informe de supervisión, de fecha 15 de
mayo de 2024.
Detectan anomalías en
el proyecto
Desde el inicio de los
trabajos el 5 de octubre de 2023 por la empresa Proyectos y Servicios de
Oriente S.A., Morales, su familia y los vecinos de Palencia han denunciado
anomalías en el desarrollo del proyecto.
Primero, reportaron el
ingreso de vehículos particulares que extraían material de construcción del
proyecto y la presencia de una pipa con rotulación de la unidad de Conservación
Vial (Covial) del Ministerio de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda
(MICIVI) utilizada por los trabajadores de la empresa constructora.
Además, observaron
actividades inusuales de acarreo de piedras que se dejaban sin ningún propósito
cerca de la galera de la planta de tratamiento.
Un pipa rotulado por
COVIAL fue utilizado por la empresa constructora para los trabajos en el
vertedero municipal. Foto de Prensa Comunitaria
En los primeros meses
de 2024, llegaron trabajadores de la empresa constructora que se instalaron en
el lugar y usaron las instalaciones abandonadas de la planta de tratamiento.
Estos trabajadores, acompañados de mujeres y niños, viven en condiciones
precarias, duermen en el suelo y sin acceso a servicios básicos ni seguridad
laboral, y se exponen a la contaminación del lugar.
Familias que llegaron a
vivir con trabajadores de la empresa Proyectos y Servicios de Oriente S.A. en
las instalaciones incompletas de la planta de tratamiento del vertedero. Foto
de Prensa Comunitaria
Durante marzo y abril
pasados, se observó la presencia de integrantes del cuerpo de ingenieros del
Ejército de Guatemala, quienes movilizaron maquinaria para efectuar trabajos de
movimiento de tierra y desechos sólidos.
Estas acciones estaban
cotizadas dentro del contrato de ejecución del proyecto para la ampliación de
la infraestructura de la planta de tratamiento en el caserío El Tabacal, y
deberían haber sido realizadas por la empresa constructora.
Desde que los
trabajadores de Proyectos y Servicios de Oriente S.A. se instalaron en la
planta de tratamiento, han aumentado los incendios forestales en las cercanías
del vertedero.
Bajo la custodia de militares que vigilaban la maquinaria del cuerpo de ingenieros, también se incendió parte del vertedero. En lo que va de 2024, Blanca Morales señala que se han registrado más de 10 incendios en las cercanías y dentro del vertedero municipal.
Vista aérea del sector
donde se ubica el vertedero municipal. Foto de Wellinton Osorio
La noche del 3 de mayo
y madrugada del 4 de mayo, se activó un incendio forestal cerca del vertedero
municipal de Palencia que también afectó el terreno de la familia de Morales.
En la tarde del 4 de
mayo, mientras Morales y su familia mitigaban parte del incendio que afectó su
propiedad, observaron a trabajadores de la empresa iniciar el fuego en una
parte de su terreno.
Por ello, solicitaron
la presencia de la Policía Nacional Civil, quienes identificaron a dos
trabajadores de la empresa constructora, uno de ellos menor de edad, según consta
en la diligencia 253-2024.
Posteriormente,
ratificaron la denuncia en el MP y PDH contra la empresa constructora y las
autoridades municipales. Hasta la fecha, no hay seguimiento de estas denuncias.
Acciones de diálogo y
cabildeo con autoridades
Morales ha sido parte
de varios grupos de vecinos que han liderado procesos de fiscalización y
diálogo, buscando una solución viable al problema del vertedero municipal. En
febrero de 2017, la municipalidad de Palencia instauró una mesa de diálogo en
la que invitaron a ADIPA. A lo largo de 2017 se realizaron varias reuniones;
sin embargo, no se logró ningún acuerdo debido a que el representante de la
municipalidad siempre participaba en estos espacios sin poder de decisión.
En enero de 2019,
Blanca junto a otros vecinos entregó nuevamente una denuncia al juez de asuntos
municipales. A los pocos meses, el juez fue removido de su cargo y no se
alcanzó ningún acuerdo para solucionar la problemática. A pesar de que las
acciones de ADIPA mermaron y la asociación de vecinos se desintegró con la
llegada de la pandemia, Morales siguió liderando procesos comunitarios de
fiscalización y denuncia.
En las elecciones de
2023, por primera vez en la historia del municipio, dos diputados de Palencia
llegaron al Congreso por el partido Movimiento Semilla: Luis Cáceres, un
estudiante de Ciencias Jurídicas, y Andrea Reyes, abogada y notaria, fiscal
nacional del Movimiento Semilla y sobrina del alcalde de Palencia, Beto Reyes.
Esto abrió la
posibilidad para que los vecinos canalizaran sus denuncias y propuestas a
través de los diputados. Sin embargo, únicamente el diputado Luis Cáceres
sostuvo en algunas ocasiones espacios de acercamiento con los vecinos.
En reiteradas ocasiones
se informó al diputado sobre los problemas ambientales en el vertedero, así
como sobre las anomalías y condiciones laborales de los trabajadores de la
empresa Proyectos y Servicios de Oriente S.A.
No obstante, en ningún
momento se dio seguimiento al tema, y finalmente cortó relaciones con los
vecinos.
El resto de los
diputados de la bancada Semilla que durante la campaña sostuvieron propuestas
de fiscalización de las obras públicas del municipio y del alcalde, en estos
primeros seis meses de gobierno, únicamente han realizado una visita
institucional al Centro de Atención Permanente (CAP) de Palencia y a la aldea
El Fiscal.
En marzo de 2024,
durante una asamblea comunitaria en el marco de la Cumbre Plurinacional por el
Agua, Morales fue electa como representante del municipio de Palencia para
integrar la Comisión Plurinacional por el Agua, un espacio que articula a
líderes comunitarios, autoridades indígenas y representantes de organizaciones
de base de distintos territorios.
En marzo, la Comisión
Plurinacional presentó un pliego de demandas y propuestas al presidente y a los
ministros; en abril, sostuvieron una reunión con la ministra de Ambiente,
Patricia Orantes, y el viceministro del Agua, Jaime Luis Carrera.
Blanca Morales junto al
viceministro de Agua en una reunión con autoridades indígenas y dirigentes
comunitarios, en abril de 2024. Foto del MARN
En este espacio, Morales
mencionó el problema del vertedero municipal de Palencia y sus impactos en el
ambiente para la zona norte de la ciudad y del departamento de Guatemala,
solicitó una inspección por parte de Ministerio de Ambiente y Recursos
Naturales (MARN) al lugar. Sin embargo, no se generó ningún acuerdo y no se ha
dado ningún tipo de seguimiento.
Por Wellinton Osorio